miércoles, 25 de marzo de 2009

Mis noches blueberry


Domingo por la tarde. Últimos calores del verano santiaguino. Cerramos la cortina azul de nuestra pieza. Alimentamos a Manuela, nuestra tortuga. Prendemos la TV. Hacemos un té verde para mi, un té rojo para ti. Vemos My Blueberry Nights y nos enamoramos de ese café nocturno, del pie de blueberry con helado. De las postales que le envia Izzy a Jeremy desde sus viajes para desenamorarse y volver a él limpia, sin ex amores en mente, clara para él. Recordamos como se inició hace casi un año nuestro amor, también después de un quiebre doloroso, pero que nos hizo encontrarnos, mirarnos, amarnos.